El maíz arcoíris o Glass Gem Corn se caracteriza por su peculiar paleta de tonalidades, pero también por ser un alimento natural, a diferencia del resto de alimentos. Su historia se sitúa en Oklahoma, en los mismísimos Estados Unidos. Es por ello que, si bien no hay que irse muy lejos para encontrar las típicas mazorcas de maíz, amarillas y uniformes, formadas por sus pequeños granos comestibles, sí debemos cruzar el charco . para degustar una mazorca de colores.

El maíz arcoíris tiene su origen en Oklahoma y su historia está relacionada con la comunidad cherokee

¿Cómo es posible? Todo comenzó cuando el estadounidense Carl Barnes se propuso explorar sus raíces. Barnes, que habitaba en Oklahoma, tenía descendencia de la comunidad norteamericana cherokee. Para este grupo, los maíces de colores eran su día a día. Movido por la necesidad de reconectar con su herencia cultural, Barnes plantó semillas de Glass Gem Corn en su terreno.

Poco a poco fue especializándose en el tema hasta llegar a aislar los tipos ancestrales de maíz que se habían perdido tras la reubicación en 1800 de las tribus nativas norteamericanas, que se situaban en el Oklahoma de hoy. Así se hizo con los maíces de colores.

Esta variedad que ha pasado de generación en generación se mantuvo viva (tras el trabajo de Barnes) por el campesino Greg Schoen. En 1994 conoció a Barnes en una reunión de plantas autóctonas y se enamoró de sus maíces. Tras recibir unas semillas de regaló marchó eufórico a plantarlas. Primero en Nuevo México, y después, hacia 2005, en Santa Fe.

Maíz de color y tradicional

Schoen innovó y sembró esta variedad de maíz al lado de la tradicional. Al juntarse se crearon nuevas variedades de colores. El experimento fue todo un éxito y llegó a dar nombre a las cepas recién creadas: circus colors, true rainbow, deep blue…

Parece que el secreto de la semilla arcoíris reside en el cruce de una especie mini de maíz palomero llamado Pawnee, con uno de harina roja y otro de nombre Greyhorse, ambos originales de Oklahoma.

Mientras que el clima sea cálido y la tierra goce de rayos directos de sol, no hay ningún problema para que crezcan estas semillas, sea donde sea. La mejor época del año para que nazca es finales de primavera, pero a diferencia del maíz tradicional, estas mazorcas no se consumen. Su función, además de decorativa, es la de convertirse en harina o palomitas. Eso sí, estas últimas son blancas como la nieve.