Las patatas al estilo Hasselback son un acompañamiento de origen sueco. Lo que les hace especial es su delicado corte al estilo acordeón, que facilita que los diferentes sabores entren en el tubérculo, formando asà un sabor más sabroso. Además, con esta receta la patata queda muy crujiente por fuera y suave por dentro, perfecta para comerla con una buena txuleta o algún rico pescado.
Las patatas al estilo Hasselback tienen su origen en 1700 en Estocolmo
El origen de este plato se remonta al año 1700, cuando se convirtió en una comida realmente famosa en Suecia. Su nombre viene del restaurante Hasselback, en Estocolmo. Sus patatas asadas se hicieron conocidas por la gente que frecuentaba el local y finalmente los habitantes de la zona fueron metiendo la receta a sus casas, convirtiéndola en un plato tÃpico sueco.
Pero, ¿cómo se preparan estas papas? Los pasos a seguir son sencillos. Lo primero es precalentar el horno a 200ºC. Mientras tanto lo ideal es preparar los cortes de las patatas, que es lo que va a diferenciar la preparación. La clave está en formar láminas de medio centÃmetro, pero sin llegar hasta el final de la patata, ya que esta no se puede romper.
Además, quien quiera puede introducir especias como ajos o hierbas aromáticas entre cada lámina. De esta forma los sabores se integrarán a la receta principal, dando un toque único al plato. Una buena forma de incluir estos ingredientes es con mantequilla. Para hacer la mantequilla del relleno se necesita ajo triturado, sal, pimienta y hierbas muy picadas, al igual que mantequilla.
Cuando esté toda la mezcla preparada llega el momento de ponerla en los cortes de las patatas. Puede ponerse en todos o en algunos, ya que el resto irá a la superficie de las patatas. Para terminar este suculento plato, solo queda poner las patatas en el horno y rociarlas con un chorrito de aceite de oliva. Tras 45 minutos de horneado, estarán listas para ser comidas. El truco para saber si están o no en su punto es pincharlas con un palillo, ya que al pinchar sabremos si están cocidas por dentro.
Solas o acompañadas
Las patatas al estilo Hasselback son la mejor receta para sorprender a los invitados. Se pueden comer solas o como acompañamiento. Sea como fuere, el sabor que se consigue con esta técnica es único y muy aromático. Una forma de innovar en la cocina, pero a su vez con una gran tradición.