Cómo enfriar el vino

Congelar las uvas es uno de los mejores métodos para enfriar el vino [Foto: diariovasco.com]

Trucos

Cinco métodos para enfriar el vino rápidamente

Algunos exigen cierta previsión y otros se pueden hacer en un momento, pero todos ellos aseguran que el vino estará a su temperatura óptima

diariovasco.com | 23/09/2017 |

Los métodos para enfriar el vino de manera rápida en los días calurosos o cuando creemos que nuestras botellas no están a la temperatura adecuada son muy socorridos por la gente despistada que se le olvida meter el vino en la nevera antes de su consumo. Los siguientes trucos son ideales para evitar ese tipo de situaciones incomodas, además alguno de estos trucos no estropean la calidad del vino en absoluto.

Los métodos para enfriar el vino son trucos ideales para evitar situaciones incómodas. Además, muchos de ellos no estropean la calidad del caldo

En primer lugar, está el sistema tradicional, es decir, introducir en una cubitera de hielos, agua fría o hielo y la botella que deseamos enfriar. La tenemos que dejar reposar en su interior durante 15 minutos. Para acelerar el proceso, podemos disolver una gran cantidad de sal en el agua y a continuación agregarla a la cubitera.

También estaría el método del papel mojado. Igual de efectivo que el sistema anterior y en caso de no disponer de hielos o de agua fría en ese momento, este método permite enfriar el vino igual de rápido pero de manera más sencilla. Consiste en envolver la botella en abundante papel de cocina y mojarla. Después tenemos que introducir la botella envuelta en papel mojado en el congelador entre 10 y 15 minutos.

El de las uvas congeladas se trata de uno de los sistemas más rápidos para enfriar el vino, pero exige cierta antelación. Este método se basa en guardar en el congelador un par de uvas sueltas para cuando necesites enfriar rápidamente el vino. Para ello, tenemos que introducirlas simplemente en la copa de vino y dejarlas un par de minutos. Este sistema preserva en buena medida el sabor del vino, ya que no contiene agua.

El método del té inglés consiste en introducir un poco de hielo en una bolsita para alimentos pequeños, cerrarla e introducirla en la copa de vino un par de minutos. Se trata de un sistema rápido pero engorroso y poco práctico, ya que no transfiere agua, pero el plástico puede llegar a alterar el sabor del vino.

¿Por qué no hielos?

Por último, una opción siempre sencilla es la de añadir al vino unos cubitos de hielo. Si eres una persona con la mente abierta y te gusta romper moldes, este truco es perfecto para ti. Se basa en, como en muchas otras bebidas, añadir cubitos de hielo al vino. Sin duda, es el sistema más rápido de todos, muy de moda en hostelería y especialmente entre los más jóvenes. Sin embargo, mediante este método el sabor del vino se altera completamente por la mezcla directa con el hielo.