Además de sus propiedades, las verduras tienen una característica que jugará a nuestro favor, y es su color. Los zumos resultantes serán atractivos a la vista, porque tanto el verde intenso como el naranja vistoso o el atractivo rojo despertará los deseos de probar esa bebida antes incluso de probarla.
Los zumos verdes están compuestos por verduras y vegetales como las lechugas, las acelgas, las endibias, el pepino, el apio o las espinacas. Extraer su jugo y añadirle perejil fresco es una buena idea que puede enriquecerse con algo de fruta. En este caso, la manzana es la pieza idónea al proporcionar un gusto dulce.
Estas bebidas se encuentran indicadas para casos de anemia, dolencias de hígado, retención de líquidos y para el cuidado de la salud de los huesos. Conviene no añadirle lácteos para no entorpecer la absorción de hierro tan abundante en este tipo de verduras de hoja verde.
Los zumos son frescos, coloridos y, sobre todo, muy sanos
Nuestras preferencias pueden inclinarse hacia el naranja, y aquí la zanahoria y la calabaza son las reinas. Un buen zumo de zanahoria puede mejorar con tomate y pepino que, sin variar su color naranja, aportan más elementos beneficiosos para la salud. En el caso de que queramos utilizar la calabaza, primero debemos cocinarla para que sea digestiva.
Estos zumos se encuentran especialmente indicados para cuidar la salud ocular, mejorar el estado de nuestra piel y mantener en condiciones las mucosas para que no se sequen o irriten. También es muy recomendable en personas con dolencias en la boca o molestias en el esófago.
Zumo rojo
Los más apasionados quizá opten por el rojo. Estos zumos tienen como componente principal el tomate y la remolacha. Una buena idea es unir el tomate con pepino y limón, o la remolacha con zanahoria. Así aseguramos un aporte extra de vitamina C, potasio, magnesio, folatos, provitamina A y compuestos antioxidantes.
Estos preparados son convenientes en casos de colesterol elevado, trastornos cardiovasculares, hipertensión arterial, procesos degenerativos y para depurar y mejorar la calidad de la sangre.
La próxima ocasión que se piense en un refrescante zumo habrá que abrir la posibilidad de que sea de verduras, con lo que variaremos los habituales sabores de las frutas y cuidaremos nuestra salud.