El agua de azahar está presente en todos los roscos de Reyes, pero muchos no sabemos de qué se trata ni qué aspecto tiene. Lo primero que hay que señalar al respecto es que el agua de azahar se obtiene después del destilado en corriente de vapor de la infusión de los pétalos de la flor de azahar de naranjo amargo, también conocido como ‘Citrus x aurantium’.
Se trata de una flor con un aroma muy potente y de pequeño tamaño, que suele tener un color entre blanco y violeta (‘azahar’ significa ‘flor blanca’ en árabe) y que aunque la relacionamos con los naranjos, también es la flor de los limoneros y de otros árboles que dan cítricos.
El agua de azahar es un líquido transparente que debemos conservar en tarros de cristal oscuro (para preservarlo de los efectos de la luz) en el frigorífico o la nevera. Su conservación es larga, ya que es un destilado, pero si vemos que cambia de color o textura, deberemos deshacernos del envase porque el líquido ya no estará en buenas condiciones.
El agua de azahar es un destilado de los pétalos de flor; es sutil en sabor y potente en aroma
El agua de azahar es conocida sobre todo por su presencia en los roscos de Reyes, pero también resulta prácticamente imprescindible en otras preparaciones dulces como los brioches, diferentes tipos de bizcochos y almíbares. Su sabor a flor es sutil, pero su aroma es potente, por lo que el equilibrio es perfecto.
Además, el agua de azahar tiene unas propiedades medicinales muy apreciadas. Desde hace siglos, se ha utilizado para evitar molestias menstruales o tratar cólicos, pero también para tratar estados nerviosos. Por último, no se puede obviar su valor en la industria del perfume.
Cómo preparar agua de azahar
Si queremos preparar agua de azahar, debemos utilizar 50 gramos de flores secas por cada medio litro de agua mineral. Una vez que el agua haya llegado a su punto de ebullición, apagaremos el fuego y pondremos las flores. Deberemos removerlas para que su esencia quede en el agua. Después, deberemos verter el contenido a un bol, taparlo con papel film y dejarlo en un lugar sombrío y a temperatura ambiente durante 24 horas.
Transcurrido ese tiempo, bastará con colar el agua, bien con un colador de tela, bien con una gasa, y guardarlo en un envase de cristal oscuro en el frigorífico.