Ingerir una ensalada al día previene la demencia, al menos así lo asegura reciente estudio publicado por el periódico 'Neurology'. Todo ser humano está destinado a alcanzar la vejez, y disfunciones como la pérdida de la memoria son trabas que inevitablemente tenderán a ser parte de nuestra vida. Sin embargo, eso no significa que no existan formas de reducir su impacto.
Una ensalada de verdura de hoja verde al día puede ayudar a frenar la demencia y preservar la memoria
La autora del estudio, la profesora Martha Clare Morris, es investigadora de la Universidad Rush (Chicago) y afirma que agregar una porción diaria de verduras de hoja verde a la dieta puede ser una forma sencilla de ayudar a promover la salud cerebral.
Esta misma especialista añade también que las proyecciones del informe muestran aumentos agudos en el porcentaje de personas con demencia a medida que los grupos de mayor edad continúan creciendo en número, por lo que las estrategias efectivas para prevenir la demencia son fundamentales.
El ácido fólico, dentro del grupo de las vitaminas B, se encuentra en grandes cantidades en las verduras de hoja verde, como las espinacas, las acelgas o la lechuga que pueden ayudar a preservar la memoria y las habilidades cognitivas.
Para obtener estos resultados se observaron durante más de cuatro años la evolución de 960 personas no dementes con una edad media de 81 años. Los participantes completaron un cuestionario sobre la frecuencia con la que comían ciertos alimentos y analizaron sus habilidades de pensamiento y memoria anualmente durante ese tiempo.
El cuestionario preguntaba con qué frecuencia y cuántas raciones comía la gente de tres vegetales de hoja verde. Por otro lado, la directora del estudio admitió que el balance y las conclusiones de los resultados pueden no aplicarse a adultos jóvenes y personas de color, ya que el estudio se enfocó exclusivamente en adultos mayores blancos.
Muestra una asociación
Por otro lado, los resultados siguieron siendo válidos después de tener en cuenta otros factores que podrían afectar a la salud del cerebro, como el tabaquismo, la presión arterial alta, la obesidad, el nivel educativo y la cantidad de actividades físicas y cognitivas. La especialista admite también que el estudio no prueba que el consumo de verduras de hoja verde ralentice el envejecimiento cerebral, solo muestra una asociación.