Dos raíces de plata de regaliz

El excesivo consumo de regaliz puede conllevar problemas de hipertensión [Foto: diariovasco.com]

Mitos

Verdades y fantasías sobre los efectos medicinales de determinadas plantas

La naturaleza nos ofrece una gran variedad de plantas que podemos consumir crudas o cocinadas. Algunas de ellas, además, tienen efectos beneficiosos para nuestra salud. Sin embargo, esta propiedad se ha llevado hasta el extremo, y hay quienes defienden que solo con algunas de ellas se puede evitar por completo la utilización de fármacos.

diariovasco.com | 25/03/2015 |

Existen muchos mitos alrededor de plantas como la menta, que se la compara con la aspirina por su capacidad de calmar las jaquecas y mejorar las molestias digestivas y la acidez. En realidad, no hay pruebas que demuestren su poder antiinflamatorio para los dolores de cabeza, y los médicos recomiendan no sustituir los antiácidos por aceite de menta, porque la acidez empeorará notablemente.

Es el mismo caso que el regaliz, con propiedades curativas similares. Es más, si se consume este producto de forma prolongada puede provocar retención de líquidos e hipertensión, lo que representa un riesgo de padecer problemas cardíacos.

Los efectos del ginseng no están avalados por médicos

Relacionado con el corazón, también se asegura que el ajo favorece el control de la tensión arterial y algunos estudios no niegan que su consumo pueda disminuir algo la tensión arterial en personas con hipertensión. Lo que se niega es que baje los niveles de colesterol de la sangre, capacidad que también se le atribuye.

Un mito muy extendido es que la valeriana es el remedio natural más eficaz contra el insomnio, cuando los científicos reconocen que no hay suficientes pruebas que sustenten este efecto. Lo que sí se ha demostrado es que provoca cansancio por la mañana, dolores de cabeza, mareos y malestar estomacal.

Hay otras plantas cuyos supuestos efectos ventajosos para molestias determinadas no están científicamente probados. Una de las muy conocidas es el diente de león, recomendado para evitar síntomas de agotamiento, dolor de cabeza, cólico o indigestión. Además de no poder asegurar estos beneficios, sus infusiones pueden provocar diarreas, y de ahí que no se aconseje su uso en personas con trastornos de vesícula biliar.

Ginseng

Otra planta con gran fama es el ginseng, que en principio se utiliza para controlar el estrés, favorecer el funcionamiento del sistema inmunitario y mejora el rendimiento. En realidad, los médicos no pueden certificar estos poderes, pero sí han registrado casos de personas que al consumirlo presentan cuadros de dolor de cabeza, sueño y problemas gastrointestinales.

La lista de plantas medicinales milagrosas es larga, y muchas de ellas no cuentan con la aprobación médica. No se trata de un movimiento de reacción de las farmacéuticas, sino de la opinión experta de profesionales con larga trayectoria en el tratamiento de nuestra salud.