Existen diversos errores al utilizar, escoger, limpiar e incluso guardar los cuchillos, que pueden provocar que su estado se deteriore mucho más rápido de lo que debería.
Un gran error es meter los cuchillos con los que cocinamos al lavavajillas
El primer gran error suele tener lugar en la compra de los cuchillos. En este caso pasarse de ahorrador sale caro, ya que en la calidad de este utensilio de cocina el precio sí importa. Antes de adquirir un juego de cuchillos conviene comparar y ver para qué se van a necesitar, para evitar el derroche. Pero apostar por el más barato a la larga no sale rentable.
Compensa gastarse un poco más de lo que nos gustaría y asegurarnos de estar adquiriendo unos cuchillos que cortan bien y que nos van a durar más de un uso.
Además, si se pueden probar, mejor. Ya no solo por comprobar el corte, sino porque el peso y la manera en la que se adapte a nuestra mano es también un factor a tener en cuenta.
Pero escoger bien no es la única forma de procurar una larga vida a nuestros cuchillos. Y es que otro error muy común a la hora de manejar los cuchillos es utilizarlos con tablas como las de cristal o metacrilato, con las que los filos se estropean muchísimo antes.
Errores tras su uso
Uno de los errores muy comunes que realizamos de manera inconsciente es guardar los cuchillos de cualquier forma en los cajones. Con cada movimiento de cajón y golpe cuando los sacamos dañamos el filo, por lo que conviene incluir en nuestra cocina un imán para colocar los cuchillos o cualquier otro artículo dirigido a su conservación para proteger su cuchilla.
Además de ello, antes de guardarlos conviene tener cuidado con el lavado. Puede resultar algo tedioso limpiar, a mano, uno a uno todos los cuchillos que se han utilizado, por lo que los cuchillos ‘multitarea’ que utilizamos para comer se pueden introducir en el lavavajillas, pero no conviene hacer esto con todos.
Las altas temperaturas que soporta la vajilla durante el lavado dañan seriamente la junta entre la pieza metálica y el mango, por lo que es mejor limpiar a mano los cuchillos que específicos que se utilizan para cocinar.