Incluir especias en los postres es todo un acierto. Aunque al oír la palabra ‘especia’ la mayoría piensa en platos salados condimentados con orégano, albahaca, pimienta… detrás del secreto de los postres más exquisitos se encuentran especias, que van mucho más allá de la canela en rama.
De entre las especias, el azafrán es perfecto para postres de fruta
Aunque esto no quiere decir que la canela no sea útil. Ya sea en polvo o en rama, la canela es la especia por excelencia a la hora de preparar postres. Natillas o arroz con leche, son recetas que no se conciben con este dulce pero amaderado toque de sabor, aunque cafés, tés e incluso combinados encuentran en la canela un toque único.
Junto a esta, la vainilla es otro de los imprescindibles si hablamos de especias y postres. En su caso, la vainilla es utilizada en helados, natillas y masas de pasteles, magdalenas y bizcochos.
La nuez moscada, por su parte, es una especia muy utilizada en platos salados y cada vez más presente en postres. Cremas, guisos y carnes son sazonados con la ralladura de esta nuez, un aroma que conquista ahora en flanes, cremas dulces y tartas.
Otras especias más curiosas en postres
Estas especias son quizás las más comunes en la repostería de nuestro país, aunque existen otras muchas variedades en nuestra despensa con las que conseguir un postre de chef.
El azafrán, muy cotizado y utilizado en la tradicional paella, es también oro para los postres. Platos afrutados y frescos como cremas y soufflés de plátano o mango se convierten en un dulce manjar con el toque de azafrán. Es también un gran secreto con el que condimentar las lenguas de gato.
Aunque si queremos dar un toque diferente a nuestro postre de fruta, como la compota, el clavo es más económico que el azafrán y aporta también un aroma muy personal.
Por su parte, a la hora de dar sabor a bollos, pasteles y galletas, hay dos especias que representan un acierto seguro: el cardamomo y el anís estrellado. El primero evoca el aroma del eucalipto y es muy utilizado también en arroces y platos árabes. El anís estrellado, más propio de la cocina oriental, está muy presente en preparaciones picantes e incluso en bebidas.