refresco: mal hábito

El refresco en el chiringuito, un peligroso hábito para mantener la dieta [Foto: diariovasco.com]

Propuestas playeras

Dieta en la playa: más allá del sándwich

Comer en la playa es una opción muy recurrente en los días de calor, en especial para aquellos que trabajan y aprovechan estas horas para tomar el sol. Pero, ¿qué opciones hay para disfrutar de una dieta rica y sana en la playa a la orilla del mar?

diariovasco.com | 05/07/2014 |

Hay mucha gente a la que le gusta pasar el día en la playa o quienes aprovechan el mediodía para extender la toalla en el arenal de turno. Pues bien, todos ellos deben tener cuidado con la alimentación que mantienen durante estos meses de verano. Apostar por el chiringuito, las cervezas y las tapas puede traer consecuencias negativas para el organismo, ya que suele conllevar frecuentemente un aumento de peso. Por ello, aquí van algunas propuestas que pueden ayudar a mantener el cuerpo en forma con una buena dieta sin salir de la playa.

Lo más importante es llevar uno mismo la comida de casa. Además de ser una propuesta mucho más barata, va a permitir crear una dieta más equilibrada. Lo primero que debemos hacer es sacar de la nevera todos esos productos que no son saludables y que, no obstante, son muy habituales en cualquier playa. Hablamos de las bolsas de patatas, embutidos, refrescos… productos que llenan las neveras veraniegas pero que no ayudan a cuidar el cuerpo.

Propuestas saludables

Junto a la hidratación, fundamental en estos meses, la dieta debe ser rica en vitaminas y betacarotenos (alimentos como espárragos, zanahoria, espinacas, tomates, calabazas…). En este caso, os presentamos dos propuestas que seguro hacen de la dieta algo saludable y atractivo para el paladar. Y es que lo sano no está reñido con lo rico.

La pasta, el arroz o pollo asado son algunas propuestas sencillas y ricas

En primer lugar, pasta o arroz. Ambas opciones son muy buenas para realizar platos fríos y recuperar toda la energía que pierdes en la playa y, además, tienen el extra de que se mantienen en muy buenas condiciones pese al calor. Algunos ejemplos podrían ser ensalada de pasta, arroz con piña, manzana y pasas o pasta con atún. Y de postre podríamos añadir siempre una pieza de fruta.

Para la segunda propuesta hay que tirar del menú mediterráneo. Serían platos tan apetecibles como melón con jamón, pollo asado o incluso la clásica tortilla de patata, que aporta una fuerte cantidad de vitaminas.

 Son sólo algunos pocos ejemplos de platos que nos harán disfrutar de la gastronomía desde la toalla pero sin perder de vista la importancia de mantener nuestro cuerpo en forma.

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