Conceptos básicos maridaje

Siempre viene bien tener unos conceptos básicos en torno al maridaje [Foto: diariovasco.com]

Acompañamiento

Descubre los conceptos básicos para maridar

Aprender a maridar puede ser todo un arte, aunque no hay que ser una gran experto en vino para acertar en los caldos que acompañarán a nuestro menú

diariovasco.com | 24/11/2017 |

Siempre viene bien tener unos conceptos básicos en torno al maridaje. Y es que si queremos acertar a la hora de maridar, lo primero es pensar en el vino como parte del menú. Al igual pensamos en los entrantes, primer plato, segundo plato y postre de forma que queden compensados y equilibrados se debe hacer lo mismo con el vino.

A la hora de maridar se debe tener en cuenta si el vino es joven, fermentado en barrica o crianza

Además de ello, deben seguir un orden de intensidad similar al de los platos, es decir, normalmente se va de platos más ligeros a preparaciones más contundentes. Lo mismo haremos con los caldos, que deben ir de más suaves a más contundentes. Así, se empezará por blancos o rosados, para seguir con tintos (de jóvenes a maduros) y finalizar con los dulces.

Aunque no basta con tener en cuenta la variedad, ya que su maduración y tratamiento también son un gran condicionante para acertar al maridar. Es por ello que dependiendo de los platos escogidos para empezar, habrá que elegir desde un rosado o blanco joven, para entrantes ligeros, hasta un blanco estructurado iría con pescados y mariscos.

Por su parte, para pescados en salsa o platos algo más contundentes, un blanco fermentado en barrica o un tinto joven es la mejor opción. Si por el contrario el plato principal es una carne pesada o un guiso contundente, maridar la receta con un tinto reserva o un gran reserva es la mejor opción.

Aprende a maridar a tu gusto

Una cosa son las normas que están establecidas y otras lo que te apetezca hacer. Y es que aunque el mundo del vino puede parecer rígido o estructurado, lo cierto es que el juego y las combinaciones también tienen cabida.

Maridar puede ser también una oportunidad de experimentar contrastes, por lo que se pueden también romper las normas y combinar una carne ligera con verduras con un tinto crianza. Aunque si se va a experimentar con invitados y sin conocer el vino, lo mejor es probar primero.

Y por último, el principio básico a la hora de maridar: sigue tu gusto. Escoge un vino que te guste por sí solo, sin acompañar alimentos. Si se trata de un sabor y aroma que te gusta probablemente tengas muchas más papeletas para acertar.