Principio alimentación macrobiótica

Los principios de la alimentación macrobiótica nos ayudan a sentirnos mejor [Foto: diariovasco.com]

Cocina equilibrada

¿Cuáles son los principios de la alimentación macrobiótica?

Este tipo de cocina se basa en una manera de comer basada en el principio de equilibrio que presenta el Ying y el Yang. Se trata de una adaptación de la gastronomía tradicional de Extremo Oriente en la que comida, medicina e incluso espiritualidad se fusionan.

diariovasco.com | 19/05/2016 |

Uno de los principios de la alimentación macrobiótica busca la armonía entre las necesidades físicas y anémicas de la persona. En líneas generales, puede ser entendida como la comprensión de las energías que nos transmite lo que consumimos y cómo encaja con nuestro estado emocional y físico.

La alimentación macrobiótica, con sus principios,  nos ayuda a entender nuestro cuerpo

En pocas palabras, la alimentación macrobiótica es una forma de alimentar cuerpo y alma, ya que como siempre se ha dicho, eres lo que comes. Por ello, esta cultura culinaria ayuda a controlar nuestras energías y emociones.

La alimentación macrobiótica se sustenta en unos principios básicos, que podrían ser englobados en estas cuatro ideas:

  • Comer productos de la tierra, a poder ser de temporada y ecológicos; es decir, libres de agentes tóxicos.
  • Combinar los alimentos, ya que sabemos las propiedades de los alimentos pero no cómo interactúan entre ellas. Y si se apuesta más por la verdura que por la carne, mejor.
  • No consumir alimentos con exceso de grasa, ya que resultan algo agresivos para nuestra salud y por consiguiente, para nuestro estado anémico.
  • Comer respetando las necesidades de nuestro cuerpo. En este caso no solo se tiene en cuenta si tenemos mucho apetito o no, es importante también tener en cuenta factores como si tenemos frío o calor, o si necesitamos relajarnos.

La alimentación macrobiótica alberga multitud de conceptos más, aunque se podría definir en líneas generales con estas cuatro ideas. Seguir este tipo de ideas no solo ayuda a sentirse mejor, sino también a entender mejor nuestro cuerpo y aprender a darle lo que necesita.

Fácil de hacer

Este tipo de cocina es más sencilla de lo que pueda parecer. De hecho, a diario elaboramos platos de este tipo de cocina sin darnos cuenta. Un cus cus con garbanzos, compota de manzana, un arroz con lentejas o incluso unos garbanzos con puerro y otras verduras entran dentro de estos ideales.

Este tipo de cocina abarca tanto platos dulces como salados, la clave está en entender todas las posibilidades de los alimentos. La quinoa por ejemplo, es una buena opción en este tipo de dieta. Este pseudocereal en la actualidad está cobrando mucho protagonismo en la gastronomía occidental, por lo que no es extraño encontrar recetas con la ella como protagonista.

Este alimento abre un amplio abanico de posibilidades a la hora de cocinar, ya que se puede utilizar como sustituto de cualquier proteína animal, como cereal, o como ligadura para un plato de verduras. Sirve como base para preparar hamburguesas, albóndigas o rissotos; y de acompañamiento en ensaladas o potajes.