Aunque seguro que hay muchos más, hay ciertos errores muy habituales en la cocina que nos dificultan nuestra experiencia en los fogones sin que ni siquiera nos demos cuenta. A la hora de ir a preparar, muchas veces por las prisas, dejamos muchos detalles que marcan la diferencia al azar.

Uno de los errores más frecuentes al cocinar es utilizar demasiado aceite; se pierde tiempo y sabor

Uno de los errores más comunes en la cocina tiene lugar cuando freímos. Sobre todo cuando lo hacemos para varias personas, tendemos a llenar la sartén cubriendo cada espacio libre. Lejos de acelerar el proceso de freír, lo que conseguimos con esto es que los alimentos tarden más en hacerse. Es mejor llenar poco la sartén para que el calor se concentre en cada pieza de alimento.

Pero si hay un gesto que no hacemos y tiene importancia, es el de probar la comida. Puede parecer una tontería, pero a menudo caemos en el error de presentar un plato soso, demasiado salado o con otros defectos, por el simple hecho de no haberlo probado. Corregirlo es mucho más sencillo cuando se está elaborando, por lo que recuerda probar siempre el plato durante su preparación.

Y es que cada paso cuenta, y para tener tiempo de atender cada uno, es importante cocinar con tiempo. Uno de los errores más repetidos en la cocina es el esperar a tener hambre para elaborar nuestras recetas. Este gesto nos lleva a elaborar nuestros platos de forma acelerada, y si en general las prisas no son buenas, en el arte culinario menos.

Presta atención a los cuchillos

Es muy habitual contar con un gran equipo de cuchillos en la cocina de todo tipo de filos y tamaños, pero la realidad es que se presta muy poca atención a su uso y estado. Por un lado es muy importante llevar a cabo un buen mantenimiento de los mismos. Al fin y al cabo, la mayoría de los alimentos que nos llevamos a la boca pasan por la hoja de un cuchillo, y su textura y forma dependen mucho también del corte, lo que sin duda hará variar nuestra sensación del tacto en la boca. Recuerda tener la cuchillería afilada.

Además de esto, cada cuchillo tiene su función: si quieres obtener un buen resultado sin destrozar la comida y sacar el máximo partido posible al menaje de cocina piensa en su función antes de escogerlo.