Es una de las eternas discusiones y un elemento que siempre trae consigo polémica. En esta ocasión ha sido un estudio de la Universidad de Navarra el que asegura que la ingesta de este alimento puede tener relación directa con la obesidad y el sobrepeso. Por centrarnos en el dato concreto, esta investigación llevada a cabo dentro del proyecto SUN (Seguimiento Universidad de Navarra) y publicada a través de los profesores Miguel A. Martínez-González y Maira Bes-Rastrollo, afirma que el consumo de dos o más raciones de pan blanco al día aumenta el riesgo de obesidad de una persona en un 40% frente a aquellos que reducen su consumo a tan sólo una ración a la semana. Para aquellos que estén acostumbrados a utilizar este alimento, recalcar que cada ración de pan está compuesta por tres rodajas.
Aquellos que consumen dos raciones al día de pan blanco tienen un 40% más de riesgo de sufrir obesidad
Dicha investigación fue realizada a un total de 9.267 personas (graduados universitarios pertenecientes al proyecto SUN) a lo largo de un periodo medio de cinco años y teniendo en cuenta previamente los hábitos alimentarios de cada uno de ellos para conocer la frecuencia con la que consumían cada alimento. Pues bien, los resultados de este estudio evidenciaron que el consumo conjunto de pan blanco y pan integral no se podía relacionar directamente con un mayor riesgo de sobrepeso. Sin embargo, sí que se observó que aquellos que únicamente hacían uso de pan blanco eran un 40% más propensos a sufrir obesidad.
Razones para evitar el pan blanco
Llegados a este punto, queda claro que la ingesta de este alimento puede ser perjudicial para nuestro organismo. Pero, ¿qué razones hacen de él un alimento tan peligroso? Uno de los motivos que nos lleva a esta conclusión es que para elaborar pan blanco la mejor parte de la harina se retira (para dársela a animales), a lo que hay que añadir la eliminación del propio trigo, tanto el germen como el salvado. De esta manera, resulta un producto final casi sin fibra, vitaminas ni minerales. En definitiva, calorías sin nutrientes esenciales que como demuestra el estudio de SUN hay que consumir con cautela.