Tortillas de maíz

Las tortillas de maíz o trigo son perfectar para una comida informal [Foto: diariovasco.com]

Alternativas

Un mundo de recetas con tortillas de trigo o maíz

Las tortillas de trigo o maíz son muy utilizadas habitualmente para preparar fajitas, pero ¿qué hacer con ellas cuando sobran?

diariovasco.com | 28/07/2017 |

Las tortillas de trigo o maíz pueden resultar mucho más prácticas en las cocina de lo que pensamos, y es que además de preparar con ellas los clásicos burritos y fajitas mejicanos, estas tortas nos pueden dar mucho juego.

Por ejemplo, similar a las fajitas, pero mucho más ligeras y rápidas, las quesadillas son perfectas en comida, merienda o cena. Basta con rellenar la tortillas de maíz o trigo con una loncha de queso y jamón, y doblarla por la mitad para pasarla por la sartén. Se puede añadir un chorrito de aceite para que no se pegue, aunque si contamos con una buena sartén no hace falta.

En muchos establecimientos se pueden encontrar precisamente diferentes versiones de fajitas ligeras con tortillas de maíz o trigo, preparadas con quesos frescos o quesos de cabra, rúcula y tomate.

Se pueden aprovechar las tortillas de maíz o trigo para preparar aperitivos templados de salchicha

De hecho, para los cada vez más numerosos amantes del aguacate, existe también una versión con aguacate, en la que a la rúcula o los canónigos se les añaden aguacate y gambas. Estas preparaciones, además, se toman en frío, por lo que no se necesita recurrir a la sartén ni similares.

Las tortillas de trigo o maíz, perfectas para el aperitivo

Para una barbacoa, un picnic en la playa o en el campo, o simplemente para una comida en casa, se pueden prepara infinidad de versiones de aperitivo.

La ventaja de las tortillas de maíz y trigo es que están pensadas para comer con las manos sin mancharse, lo que las convierte en un acierto para cualquier picoteo desenfadado.

Si se va a apostar por un rollito frío, se pueden cortar las tortas en tiras. Una vez listas, se unta cada tira con queso en crema, se añade un poco de aguacate, y se introduce en su interior una gamba, langostino o pedacito de pollo o pavo. Para finiquitar el pintxo se enrolla bien, teniendo cuidado de que no se desmonte.

Un buen truco para conseguir que la parte final quede pegada es dejar el final de la tira libre, o solo con un poco de queso, de forma que la última vuelta que demos para sellarlo se quede pegado.

Aunque se puede optar también por un bocado caliente. Para ello se puede o bien calentar el relleno, o bien sellar la preparación. Una versión de bocado caliente es la de salchicha, que se puede preparar o con salchichas largas cortadas o con las clásicas pequeñas que vienen en tarro.

Con las tiras ya preparadas, se pone la salsa al gusto, ya sea mayonesa, mostaza o kétchup, queso en lonchas y tras calentar la salchicha se coloca sobre la tortilla y se enrolla, como en el aperitivo anterior.