Los alimentos de temporada de enero nos ayudarán a comenzar bien el año, ayudándonos también a apostar por una alimentación sana. El bogavante, la zanahoria, el salmón y la piña son, por su composición nutritiva, los mejores componentes de un menú característico de estas fechas.

El salmón y el bogavante son dos de los alimentos que están en enero en su mejor momento del año

La carne de color blanco y la exquisitez del bogavante lo convierten en uno de los más preciados platos. Dice el saber popular que la mejor época para consumir el marisco es la de los meses en cuyo nombre aparece la “erre”, por lo que este mes de enero es la época más óptima para saborear este manjar cuyo principal nutriente son las proteínas (y además presenta un bajo contenido en grasas).

Cabe resaltar que existen distintas variedades de bogavante, entre las que destacan el bogavante europeo (se captura en las costas atlánticas) y el americano (costa oriental de América del Norte). La diferencia principal es que esta última tiene una carne menos sabrosa y en consecuencia, se vende a menor precio. 

La excepcionalidad de la zanahoria, por su parte, reside en su valor vitamínico y la riqueza de minerales (potasio, fósforo, calcio, magnesio y yodo). La fortaleza de su contenido queda presente en su color naranja, que se debe a la predominancia de los carotenos, entre ellos el beta-caroteno o pro-vitamina A.  

Las zanahorias de temporada se caracterizan por su piel suave y cuentan con tamaño pequeño o mediano. Además, si tienen hojas, deberán estar frescas y tener un color verde vivo. Por otro lado, hay que evitar que la zanahoria se conserve en lugares cerrados. Antes de guardarlas conviene limpiar la superficie con un trapo húmedo.

Entre los pescados, destaca el salmón, que contiene una cantidad importante de vitaminas D y la A gracias a su riqueza en grasa. La vitamina A favorece el crecimiento, conservación y reparación de las mucosas, piel y otros tipos de tejidos corporales, amén de que es una gran escudo frente a las infecciones.

Por su parte, la vitamina D regula los niveles de calcio en la sangre y favorece la absorción y fijación de este mineral en los huesos. En definitiva, debido a la composición proteínica del salmón, es recomendable consumirlo de forma habitual durante todo el año.

Enero, mes de la piña

La piña es un postre dulce cada vez más común en la mesa familiar. Especialmente en estas fechas, en las que comemos más de la cuenta, y que gracias a su carácter digestivo es el acompañante ideal para cualquier comensal. Igualmente también sirve de aperitivo gracias a un combinado importante de vitaminas, minerales y fibra. Platos como el cerdo o el pato congenian idealmente con este fruto exótico.