Aldanondo es mucho más que quesos. Es un distribuidor de alimentos de primera calidad en tres temperaturas: seco, refrigerado y congelado, con más de 1.800 referencias que le permiten ofrecer al sector hostelero un asesoramiento integral.
Mikel Aldanondo, director general de la firma, explica alguna de las claves de una empresa que atiende unas 3.000 entregas semanales de sus más de 2.500 clientes activos.
"En Aldanondo estamos cerca del cliente, pero también del pequeño productor"
– ¿Qué claves han manejado para crecer en un sector tan dinámico, complejo y bonito a la vez?
– Pues muy sencillo: trabajo, trabajo y trabajo. Mi padre y mi tío, los dos socios de la compañía, se sacrificaron mucho en los inicios. Mi padre decía que era más valioso llegar con algo de dinero que con el producto de vuelta; muy a su pesar a veces tenían que vender a pérdida, sabiendo que a la larga les iba a traer mayor recompensa.
Pero además, dando servicio a nuestros clientes con un buen producto. Primero fueron quesos y luego la variedad ha ido aumentando; ahora somos capaces de dar una solución integral en alimentación no solo a nuestros clientes de toda la vida, los comercios tradicionales, sino también al sector de la hostelería.
– ¿La calidad en el producto marca la diferencia?
– Por supuesto. Nuestra máxima ha sido hacer llegar a nuestro cliente el mejor producto al mejor precio.
– ¿El cliente sabe apreciar la cercanía que ofrecen?
– La central de la distribuidora la hemos tenido siempre en Olaberría, desde donde atendemos a Gipuzkoa, Navarra y Álava. Ahora tenemos otra delegación en Bizkaia, para dar servicio a este territorio y a Cantabria. Nuestro objetivo es dar respuesta a una necesidad del cliente en un día o menos y para ello disponemos a día de hoy de un almacén que trabaja las 24 horas de lunes a sábado.
– También ofrecen un trato muy cercano a los productores del Goierri...
– Aparte de lo que fabricamos nosotros, disponemos de productos y quesos que elaboran baserritarras de la zona y que distribuimos por todo el País Vasco, Navarra y Cantabria. Estamos hablando de legumbres, frutos secos, manzana reineta... somos especialistas en este género que se producen en los caseríos.
"El pasado mes de octubre, en San Sebastián Gastronomika presentamos el sushi congelado"
– Hablando de reinetas, ahora empieza la temporada de sidrerías. ¿Qué servicio ofrecen a este tipo de cliente?
– A día de hoy podemos darles un servicio bastante global ya que llevamos todo lo que necesitan: queso, membrillo, nueces, carne, bacalao... Podemos incluso ofrecer los quesos ya cortados en cuñas listas para servir. Se trata de facilitarle al hostelero su tarea.
– Un producto, el queso, por el que el año pasado recibieron un importante reconocimiento, ¿verdad?
– Fue bastante sorpresa, no nos esperábamos ganar once medallas en los World Cheese Awards. Fuimos el fabricante de queso más premiado del mundo y además lo logramos en casa.
– ¿Qué valor tiene la innovación en su sector?
– En estos 50 años de andadura el sector que más hemos atendido y dominado era el de la tienda tradicional de toda la vida. Sin embargo, desde hace un tiempo el sector del turismo ha tenido un empujón muy grande en el País Vasco, por lo que queremos hacernos ver en la hostelería.
Aunque ofrecemos género tradicional de toda la vida, estamos en constante búsqueda de nuevos productos y soluciones para el hostelero, y aquí es donde entra nuestro interés por la innovación. Así, por ejemplo, en San Sebastián Gastronomika presentamos un sushi congelado que se puede servir un par de horas después de haberse sacado del congelador.
– Habla de uno de los encuentros del sector más importante en España. ¿Qué les aporta San Sebastián-Gastronomika?
– Es un escaparate en el que están presentes todos los grandes chefs, conocidos y amigos del País Vasco, un punto de encuentro al que acude mucha hostelería de aquí. Nos gusta estar presentes para demostrar que, aunque tenemos una tradición quesera muy importante, ponemos a disposición de nuestros clientes más de 1.800 referencias.