Comer de gorra

En los banquetes tiene origen la expresión "comer de gorra" [Foto: diariovasco.com]

Origen del dicho popular

Los estudiantes, los primeros en "comer de gorra"

¿Quién no ha utilizado en alguna ocasión la expresión? Todos conocemos el significado de esta frase hecha, pero quizá no seamos capaces de situar su origen o conocer por qué se emplea en ocasiones muy determinadas. Los voraces estudiantes de tiempos lejanos son los responsables del dicho popular

diariovasco.com | 26/05/2016 |

La expresión ‘comer de gorra’ tiene su origen en los tiempos en que los alumnos de las universidades vestían capa y gorra, muchos de ellos carecían de los recursos suficientes para una buena alimentación. Los esfuerzos que exigían los estudios universitarios, tanto físicos como mentales, empeoraba la situación, porque se incrementaba la sensación de hambre.

Los estudiantes solían colarse en celebraciones y saludaban con sus gorras, de ahí ‘comer de gorra’

Muchos de ellos, además, no podían recurrir a sus familias, porque éstas se encontraban lejos y habían invertido el dinero que tenían en dar buenos estudios a sus vástagos en universidades de excelencia educativa, con el objetivo de que se labraran un futuro prometedor.

Ante la imposibilidad de encontrar un camino fácil para conseguir alimentos, los estudiantes optaron por el ingenio y por utilizar técnicas pícaras para poderse llevar algo al estómago. Una de ellas fue colarse en celebraciones propias de aquella y de esta época como bautismos, cumpleaños o bodas.

Una vez dentro, y con el objeto de disimular, repartían entre los asistentes reverencias y ceremoniosos gorrazos o saludos con la gorra, mientras se quedaban callados y en una posición discreta para no llamar la atención de los anfitriones. Eso sí, su ubicación era idónea para alcanzar los sabrosos manjares que se servían en el ágape y colmar así su insaciable apetito.

Los ‘capigorrones’

De ahí que a este tipo de invitados se les llamase ‘capigorrones’. De esta palabra, y por analogía, surgió una expresión más conocida hoy día que es “comer de gorra”, dado que era el atuendo que les servía para acceder a banquetes mientras saludaban con él.

Mucho tiempo después, prácticamente en nuestros días, comenzaron a surgir cantantes e instrumentistas populares que realizaban y realizan su actuación en las vías públicas y que recogen la limosna dada por los transeúntes.

En este caso también utilizan un sombrero o gorra depositado en el suelo, por lo que se les puede considerar los dignos sucesores de una estirpe en la que el ingenio y el buen humor son sus mejores armas para mantenerse a flote y disfrutar de una alimentación razonable.