Quesos menos saludables

El roquefort es uno de los encabeza la lista de quesos menos saludables. [Foto: diariovasco.com]

Alimentación

Los cuatro quesos menos saludables

Hay ciertos quesos que son menos saludables que otros y que, aunque supongan todo un deleite para el paladar y un auténtico vicio para muchos, es mejor tomar con medida

diariovasco.com | 30/10/2018 |

Existen algunos quesos que resultan menos saludables que la mayoría de los que podemos encontrar en el mercado, ya sea por las sustancias que se utilizan al elaborarlos, por la gran cantidad de calorías que lleva un solo bocado…

El queso azul y el parmesano son algunas de las variedades de quesos menos saludables

Los quesos en spray son el súmmum de los quesos menos saludables. Es verdad que no son habituales en nuestro país, aunque su ataque contra la salud los hace dignos de mención. 100 gr contienen la friolera de 1.310 mg de sal, más de la mitad de la cantidad diaria recomendada; 46 mg de colesterol y hasta 300 calorías.

Aunque no hay que irse lejos para encontrar quesos que sean poco recomendables si se toman en exceso. Muy consumido en nuestro país, el queso azul es mucho menos saludable que cualquier otro queso que podamos tener en la nevera. Contiene 351 calorías en tan solo 100 gr. Seguro que más de uno se vuelve a pensar dos veces el tomar un poco de queso azul de postre o el atacar la bandeja de canapés en un evento.

Y en esta línea, otra de las variedades que ocupa un lugar en la lista de quesos menos saludables es el parmesano. En este caso, por cada 100 gr el parmesano tiene 839 miligramos de sodio.

Desgraciadamente, los quesos en crema son otros de los menos saludables. Y es que para conferirles esa textura se les añaden un montón de grasas, y no de las buenas precisamente; suelen ser grasas saturadas de origen animal.

Alternativas a los quesos menos saludables

La mozzarella di búfala es una buena opción si queremos dejar de lado alguno de los quesos menos saludables citados anteriormente. Esta variedad apenas tiene grasas, lactosa y colesterol. Además, al ser tan puro es muy fácil de digerir.

El queso en crema light es otra opción: tiene algo más de sabor que la mozzarella y su aporte calórico es mucho menor que el de otras variedades.

Eso sí, cuando se apuesta por quesos ‘light’ o ‘sin’ hay que tener mucho cuidado y leer los ingredientes. En muchas ocasiones al quitar grasa u otros ingredientes se les incluyen ciertos aditivos para que no pierdan las propiedades que les aportaba la sustancia retirada en cuestión.