El fugu es un pez venenoso que en Japón ha estado también prohibido en épocas anteriores, pero en la actualidad se comercializa legalmente, aunque tiene grandes controles. Se le llama pez globo porque cuando quiere escapar de sus depredadores se hincha y sube hacia la superficie.
Para preparar el fugu, este pez venenoso, el cocinero debe formarse durante tres años
Pero dentro tiene tetradotoxina, un veneno letal que se puede comparar al cianuro en cuanto a potencia mortífera. La característica de este veneno es que adormece, paraliza los músculos bloqueando el diafragma, por lo que el individuo muere asfixiado sin poder hacer nada para remediarlo.
Es un pescado muy caro y toda la cadena alimenticia debe tener una licencia especial: desde el que lo pesca hasta el cocinero que lo prepara. Este último debe pasar tres años aprendiendo y es un maestro en la utilización de los cuchillos. El hígado del pescado, junto con los ovarios, son las partes que más veneno contienen. Los intestinos también pueden ser letales
Por ello, el cuchillo debe eliminarlos y no tocar ninguna otra zona del pez porque se quedaría contaminada, con el consiguiente riesgo de envenenamiento para los comensales. Además, hay que destruir esos órganos venenosos con mucho cuidado, como si fuera material radioactivo de baja intensidad, por decirlo de alguna manera.
En la actualidad, en algunos restaurantes suelen ofertar “fugu” sin veneno procedente de piscifactorías, siendo el que se pesca en alta mar el que sigue contando con tetradotoxina. Una de las maneras que más les gusta a los japoneses comerlo –y a buen número de turistas que lo hacen también por morbo- es en sashimi.
Sigue muriendo gente
Los expertos indican que la lengua se adormece por unos instantes, con lo que se consigue un placer gastronómico fuera de lo común. Lo mismo que en Japón el sushi solo lo preparan los hombres (por la diferente temperatura de las manos, por ejemplo), solo son cocineros hombres los que tradicionalmente trabajan con el “fugu”.
Sigue falleciendo gente en la isla nipona por consumirlo, por muchos controles que se realicen. Desde el año 2000 se ha registrado el fallecimiento de veintitrés personas, buena parte de ellos pescadores porque han querido consumir el pescado en su casa y no eran expertos a la hora de trabajarlo.
Hay muchas formas de cocinarlo y se suele servir siempre en finas láminas, formando un dibujo en el plato que asemeja a la flor del crisantemo, siendo la carne casi transparente.