Precisamente, según el objetivo que tengamos frente al fogón podremos utilizar un tipo u otro de espumadera. El denominador común de todas ellas es su estructura plana, tener un mango largo y acabar en una pieza fina que puede ser de diversas formas. Aunque todas pueden parecer iguales en un primer momento, una mirada más detenida nos permitirá comprobar que la malla o red que conforma esa parte final es muy diferente en cada caso, y su función se adapta más a un tipo de cocina.
La espumadera 'wok' se ha popularizado en poco tiempo
La más habitual en los hogares es la de “agujeros”, que se emplea sobre todo para espumar. Con ella es más fácil retirar la espuma de caldos, mientras que en el caso de alimentos tiene como desventaja que es más difícil escurrirlos adecuadamente.
Otra espumadera bastante habitual es la llamada “araña”, cuya parte final se compone de una espiral con espacio entre los círculos. Su labor principal es escurrir el aceite en los fritos y retirar los alimentos de la olla o sartén. Su forma permite que el aceite caiga sin problemas porque tiene poca superficie que lo retiene, razón por la que sin embargo no puede servir para quitar la espuma de los caldos, como sucede con la anterior.
Recientemente se puede encontrar en el mercado una original espumadera denominada “wok”, en referencia al tipo de cocina oriental que se ha popularizado entre la sociedad. Este instrumento de cocina tiene la malla muy abierta, que es lo más apropiado para retirar alimentos y escurrir a la perfección tanto el aceite como el caldo.
Escurre a la perfección
Con este tipo de espumadera, además, se puede freír directamente sobre el aceite caliente. Hace de cesto para sumergir en una freidora cualquier tipo de producto, desde unas croquetas hasta carnes, pollo, patatas o rosquillas. En el caso de los fritos una ventaja fundamental es que permite escurrir a la perfección, que es muy importante porque de nada vale colocar papel absorbente en un plato si sobre él colocamos alimentos empapados en aceite.
La técnica correcta consiste en hacer un movimiento de arriba abajo para dejar caer el aceite y, tras un momento de espera, pasar el frito al plato. Del mismo modo, la espumadera “wok” también se utiliza para escurrir el agua de verduras y pasta, lo que le convierte en una alternativa muy recomendable, que puede convivir en nuestras cocinas con las espumaderas anteriores.