helado casero

Podemos crear un helado rico y barato [Foto: diariovasco.com]

Receta veraniega

Preparar un buen helado es fácil, rápido y barato

Los helados se asocian a una época, la estival, donde hace calor y se incrementa la necesidad de refrescarse. Sin embargo, no son exclusivos del verano y en muchos países se consume a bajas temperaturas. Del mismo modo, se relaciona el helado con su compra en un establecimiento comercial, cuando se puede hacer uno casero de manera muy sencilla, rápida y económica.

diariovasco.com | 08/08/2014 |

El proceso de elaboración de un helado cremoso no difiere demasiado de otras recetas más habituales en las cocinas caseras, como por ejemplo las tradicionales natillas. Para empezar, se necesitan seis u ocho yemas de huevo, un litro de leche, una cucharadita de gelatina en polvo y entre diez y doce cucharadas de azúcar. En caso de no poder ingerir este producto por razones médicas o por seguir una dieta adelgazante, se puede sustituir por fructosa o edulcorante.

Se puede elaborar un helado desde casa de forma barata y sencilla

La técnica para mezclar todos estos ingredientes es muy parecida a otros postres caseros. En primer lugar, se mezclan las yemas de huevo con el azúcar y se bate todo hasta que quede una masa espumosa. Mientras tanto, se pone a hervir la leche para añadirla posteriormente a las yemas y al azúcar poco a poco y sin dejar de remover. Es importante haber dejado enfriar previamente la leche, porque si está hirviendo las yemas se cortan.

Una vez obtenida esta masa, se calienta a baño maría a poder ser, o a fuego muy lento como segunda opción. Antes de que rompa a hervir se retira y se continúa removiendo hasta que se enfríe. Es en este momento cuando hay que añadir la gelatina disuelta en dos cucharadas de agua fría y mezclarlo todo bien.

Multitud de sabores

Después se coloca en un recipiente apto y se introduce en el congelador hasta que cuaje y obtengamos el apetecible helado cremoso. Si deseamos aportar nuestro toque particular con un sabor determinado, tan solo debemos añadir la esencia deseada junto con la gelatina. Las posibilidades son muy variadas, entre las que se encuentra la vainilla, la canela, el cacao, el café en polvo o el coco.

También podemos añadir crema de frutos secos o de frutas como fresa, melocotón o piña en lugar de las esencias. En este caso, hay que asegurarse de que no haya trozos o no sean muy grandes para evitar que se rompa la textura del helado inicial, por lo que las pasaremos antes por la batidora, y ya tenemos un delicioso postre elaborado con nuestras propias manos.