Unas tijeras

Para afilar unas tijeras podemos ayudarnos de utensilios del día a día [Foto: diariovasco.com]

Trucos

Cuatro formas de afilar unas tijeras

Conoce estos trucos para afilar tus tijeras de cocina y trocea tus alimentos con un corte perfecto.

diariovasco.com | 11/07/2017 |

Hay infinitas formas de afilar unas tijeras, la mayoría de ellas mucho más sencillas de lo que se pueda pensar. No hace falta demasiada maña ni tampoco un accesorio concreto, ya que muchos artículos que tenemos en casa pueden cumplir está función y asegurar un corte perfecto en pocos minutos y sin esfuerzo.

Nos sirve casi cualquier elemento de hierro o metal que sea lo suficientemente consistente. Un destornillador, por ejemplo, es una buena herramienta para afilar nuestras tijeras. Es tan sencillo como empuñar el destornillador con una mano y coger las tijeras con la otra, como si se quisiera cortar su barra por la mitad. Una vez se tenga todo bien asido, se realizan repetidos cortes en el hierro, que en principio no debería verse alterado. Se puede ir probando la tijera con un papel para comprobar que efectivamente ya está afilada.

Otra forma de afilar unas tijeras es utilizando papel de aluminio. Mucho más sencillo y seguro que el otro método, esta técnica consiste en coger un buen trozo de papel de aluminio, doblarlo varias veces hasta conseguir una consistencia algo más sólida de la que presenta y, simplemente, cortar el papel repetidas veces con la tijera. Este gesto nos ayudará a recuperar unas tijeras estropeadas.

Para afilar unas tijeras de forma fácil y rápida basta con doblar papel de aluminio y realizar cortes

Y es que aunque parezca curioso que podamos afilar unas tijeras únicamente con papel, lo cierto es que el papel de lija es también una buena alternativa. En este caso no hace falta doblarlo. Basta con realizar varios cortes en una hoja de papel de lija para conseguir unas tijeras nuevamente afiladas.

Aunque si no se tiene nada de esto a mano, seguro que encontramos por la cocina algún tarro grueso de vidrio. Con este accesorio el truco también está en realizar el mismo gesto que haríamos si quisiéramos cortar el tarro. Obviamente la tijera patina, ya que el tarro es circular, afilando su canto con cada movimiento.

Utensilios específicos

Aquellos que usen mucho las tijeras pueden optar directamente por hacerse con una piedra de afilar. Su utilización es algo más laboriosa, aunque el acabado es más profesional.

Para afilar unas tijeras con este tipo de utensilio lo primero es quitar, con la ayuda de un destornillador, el tornillo que une las dos hojas de la tijera. Después se humedece un poco la piedra de afilar, y se pasa primero una de las hojas. La forma correcta de hacerlo es apoyar el filo y “barrer” la zona húmeda repetidas veces. Una vez esté afilada se hace lo mismo con la otra hoja.