Enrique Macías Vega Sicilia

Enrique Macías es el Director Técnico de Viticultura de Vega Sicilia [Foto: diariovasco.com]

Entrevista

"El consumidor cada vez va conociendo más y exige más"

Enrique Macías, Director Técnico de Viticultura de Vega Sicilia, destaca tres pilares en los que se sustenta la bodega: el suelo y todos los factores ambientales que le rodean; la planta y su genética; y el hombre.

diariovasco.com | 24/04/2017 |

Enrique Macías es el Director Técnico de Viticultura de Vega Sicilia, una bodega conocida a nivel mundial por la calidad de sus vinos, algunos de ellos de auténtica leyenda. Macías explica la importancia que tiene la uva, el viñedo, en la elaboración de esos caldos.

¿Por qué hacen tan buenos vinos en Vega Sicilia?

No hay secreto. Los vinos son así a base de esfuerzo, dedicación y horas. En Vega Sicilia sobre todo nos sustentamos en tres pilares: el suelo y todos los factores ambientales que le rodean; la planta y su genética, que controlamos y seleccionamos en nuestras bodegas; y el hombre, el equipo de trabajo tanto en bodega como en viñedo que diariamente cuidan de todo con absoluto respeto a la naturaleza.

"Nuestros vinos tienen de especial la propia genética de la planta; un Tempranillo adaptado al entorno"

Podría decirse que la de Vega Sicilia es una historia de éxito basada en el viñedo, la uva. Usted mismo ha afirmado que el viñedo es el verdadero patrimonio de esta bodega. ¿Qué tiene de especial?

La propia genética de la planta, ya que es un Tempranillo adaptado al entorno. En las otras fincas de la bodega, ésas que no tienen tanta antigüedad, hemos intentado seleccionar la genética de la planta para que sean lo más resistentes posibles a las plagas y las enfermedades, que tengan gran variabilidad de clones de Tempranillo para que sean muy diversas en un entorno más naturalizado y trabajar y seleccionar sobre esas plantas de manera casera, con un vivero de referencia para tener una genética propia en la planta.

¿En el éxito hay también parte de fracasos, de pruebas que no tienen el resultado esperado?

Sin duda. Somos una finca con más de 150 años elaborando vino embotellado y con su etiqueta. En esas plantaciones se han hecho muchos estudios de manera empírica, de prueba y error. Ahora lo que ha cambiado es que tenemos más herramientas tecnológicas, estudios y conocimientos que nos permiten sacar la genética de la planta y superponer esos estudios genéticos con nuevas herramientas tecnológicas que probamos y estudiamos para ver qué conclusiones podemos sacar y aplicar luego en el campo. Debemos estar constantemente estudiando y evolucionando, y a veces hay cuestiones que ahora no nos interesan, pero más adelante quizás sí.

"Miramos siempre al equilibrio del ecosistema; ello redunda en el vino"

Vega Sicilia ha destacado también por haber renunciado al uso de herbicidas y abonos químicos desde los años 80, una tendencia hacia a la que ahora viran muchas bodegas. ¿Fueron unos adelantados a los tiempos?

Vega Sicilia siempre ha llevado un criterio de bajas producciones y respeto al suelo y el ecosistema. A lo mejor hoy está más de moda, pero en la viticultura en general siempre ha habido apego a la tierra. Nosotros cuidamos y cultivamos la uva para transformarla en una fermentación para hacer vino y por eso siempre se mira más la materia prima, porque no es que la tengamos y la comamos, sino que requerimos de unos componentes en la uva para poder hacer unas fermentaciones adecuadas. En nuestro caso, con las crianzas largas, hay unos condicionantes en la uva para que todo marche bien. Por eso siempre hemos mirado más el equilibrio en el ecosistema.

¿Cómo entienden la viticultura en Vega Sicilia?

Entendemos la viticultura como todo el entorno que vive alrededor de la viña: el bosque, los pinos, las aves que nos pueden ayudar a depredar plagas de manera natural... El mantenimiento del mayor equilibrio posible en ese entorno redunda en un beneficio de la planta que de manera natural se defiende contra plagas y enfermedades y tiene un buen equilibrio dado por el conjunto de esos factores.

Todo lo que podamos evitar en herbicidas, pesticidas y tratamientos químicos redundará en que ese ecosistema no se vea alterado y tengamos unos vinos con elegancia y personalidad, que respondan a su entorno y que nos transmitan en todo lo posible esas sensaciones que vienen desde el terruño.

"El viticultor y las bodegas nos tenemos que apretar las tuercas en cuanto a calidad"

¿Notan cómo los conocimientos de los clientes sobre el mundo del vino son cada vez más altos, lo que a su vez les obliga a elevar el listón de un vino ya de por sí excelente?

El consumidor cada vez va conociendo más y exige más, por lo que nosotros nos tenemos que poner una autoexigencia en ese sentido. El viticultor y las bodegas nos tenemos que apretar las tuercas en cuanto a calidad.  Debemos dar al consumidor una garantía de que trabajas con un compromiso de calidad en el tiempo.

Hasta ahora quizás ha habido siempre un conocimiento del producto final, del vino, pero cada vez el consumidor visita más las bodegas y los viñedos porque quiere aprender más del proceso previo, de cómo se elabora el vino, se cuida el viñedo... para llegar a la cata con mayores conocimientos. Todo ello va muy parejo también al impulso del enoturismo, que tiene una cultura y unos valores detrás. Si el entorno está bien conservado, es un patrimonio muy importante para las bodegas y las denominaciones de origen. Hay una demanda y las bodegas cada vez se preparan más para ser visitadas.