Estos cuatro trucos para abrir una lata sin abrelatas te serán de gran utilidad a falta de este accesorio de cocina. Ya sea en casa, en el campo o en la playa, seguro que tienes alguna de estas herramientas o elementos a mano para sustituir el abrelatas y acceder al interior del recipiente.
Abrir una lata sin abrelatas es posible gracias a estos trucos
Si estamos en casa y no encontramos el abrelatas, o no sabemos utilizarlo, que suele pasar, una buena alternativa al abrelatas es una cuchara de metal. Aunque suene descabellado no necesitamos ni de fuerza ni de un material puntiagudo para abrir una lata sin abrelatas, basta con un poco de paciencia y alguno de estos trucos. Lo que hay que hacer es colocar la punta de la cuchara justo sobre la línea que sella su contenido, donde se juntan el borde que sobresale y la tapa, con la cara hundida de la cuchara mirando hacia la tapa de la lata.
Esta forma de abrir la lata sin abrelatas consiste en frotar en un espacio muy reducido la cuchara contra la lata de manera repetitiva. De esta forma iremos limando la tapa hasta agujerearla. Para abrir la totalidad de la tapa deberemos correr unos centímetros la cuchara siempre por la línea de sellado y realizar este ejercicio tantas veces como sea necesario.
Este mismo truco se puede llevar a cabo con una piedra de tacto rugoso que presente algún borde o zona más fina o afilada. La fricción será la encargada de abrir la lata por lo que es importante que la superficie de la piedra no sea lisa, ya que no conseguiremos el mismo resultado.
Otra truco que nos puede ayudar a abrir la lata sin hacer uso de un abrelatas es combinar el primer agujero realizado con la cuchara, con un cuchillo de sierra. Simplemente hay que introducir la punta del cuchillo en el agujero e ir serrando siguiendo la línea de unión de la tapa con el borde.
Una navaja también nos puede ayudar a abrir una lata
Si no estamos en casa una navaja nos puede ser de gran utilidad. Lo primero de todo, para evitar percances, es buscar una superficie plana y estable sobre la que colocar la lata. Una vez esté bien posicionada, debemos colocar la herramienta de cuchillo de la navaja en perpendicular a la tapa clavando la punta contra la línea de sellado que se crea entre la tapa y el borde que sobresale. Este mismo método se puede utilizar con cualquier herramienta similar como un cincel.
Este truco consiste en agarrar de forma firme la navaja con una mano, y realizar movimientos suaves y repetitivos en la culata de la navaja hasta que consigamos atravesar la tapa. Al igual que en el caso de la cuchara, deslizaremos la navaja por la línea de cierre realizando este mismo ejercicio hasta abrir la lata por completo. Se debe tener especial cuidado con la seguridad y agarrar la herramienta de forma que si nuestra mano se desliza nuestros dedos no se encuentren con la hoja.