Gamas de alimentos

Son cinco las gamas en las que se clasifican los alimentos [Foto: diariovasco.com]

Clasificación

¿A qué se refieren las gamas de los alimentos?

De una a cinco, las gamas de los alimentos indican el estado y procesos a los que han sido sometidos los productos

diariovasco.com | 04/04/2017 |

Las gamas son una clasificación según la cual se ordenan los alimentos, empezando por los más frescos y naturales hasta los más manipulados y elaborados.

Las gamas se suelen expresar en números romanos y van de los más frescos a los más manipulados

Indicadas habitualmente en números romanos, y estipuladas de la uno a la cinco, conocer a qué gamas de alimentos pertenecen los productos nos puede ayudar a saber de qué se está hablando en cada momento.

Los alimentos de I gama hacen referencia a productos frescos como frutas, verduras, carnes, pescados y cereales que no han sufrido ningún tipo de tratamiento, ni de higiene ni de conservación. Los alimentos de esta gama además, mantienen todas sus propiedades organolépticas, es decir, el olor, el sabor y las propiedades naturales. Son productos perecederos cuyo único método de conservación es la refrigeración y que no duran demasiado tiempo.

Cuando se habla de alimentos de II gama, se hace referencia a aquellos que han sido tratados y sometidos a procesos térmicos para evitar el crecimiento de bacterias y para alargar su vida. Son productos esterilizados, envasados o enlatados, también conocidos como conservas o semiconservas, entre los que podemos encontrar frutas en almíbar, pescados, mariscos, etc. Se pueden conservar tanto en lugares secos a temperatura ambiente como a temperaturas más bajas.

Aunque estén preparados para aguantar más, estos productos también se estropean pasado un tiempo. Por ello, conviene fijarse en la fecha de caducidad antes de consumirlos, así como desechar aquellos botes o latas que estén inusualmente hinchados, ya que es un indicio de que su interior no está en buenas condiciones.

Más tratados

Los alimentos de III gama por su parte son los congelados. En este grupo podemos encontrar desde carne y pescado hasta verduras. Son alimentos cuya duración es mucho más larga que la del resto, llegando incluso al año de vida, dependiendo del producto. La clave en el caso de estos alimentos es no romper la cadena de frío, ya que entonces se estropearían.

Y los alimentos de IV gama se refieren a los productos envasados al vacío. En este grupo entrarían vegetales y frutas que han sido empaquetados en atmosferas controladas y sin aire en el envase. Este proceso aumenta su durabilidad, aunque deben ser conservados en frío y difícilmente resisten más de una semana.