Con toda probabilidad, el nombre ‘Omega 3’ se te hace conocido ya que se trata de uno de los componente estrella destacados los diversos anuncios de alimentación.

Los pescados y mariscos son los alimentos que mayor cantidad de Omega 3 contienen

El Omega 3 pertenece al grupo de los ácidos grasos poliinsaturados y, gracias a sus beneficios para la salud, lo podemos encontrar de forma natural o como elemento incorporado en una infinidad de productos. La importancia de este componente radica en que nuestro cuerpo no es capaz de producirlo por sí mismo.

Entre las consecuencias positivas que acarrea en el organismo el consumo de este ácido graso, se puede encontrar la reducción de la presión arterial en personas con hipertensión. Además, este componente ayuda a reducir los niveles de grasas en la sangre, disminuyendo el riesgo de sufrir ataques cardíacos.

Pero lo cierto es que, según revelan algunos estudios, la población no consume la cantidad de Omega 3 recomendada diariamente y no queremos que la razón del bajo consumo sea el no saber qué alimentos lo contienen.

Entre los productos que destacan por ser una fuente rica de Omega 3 se encuentran diversos pescados y marisco. Los ejemplares más ricos en son el salmón, la trucha de río, la caballa, el arenque, las sardinas y el atún, ya que contienen una gran cantidad de este ácido graso en su variante más beneficiosa: ácido docosahexanoico (DHA) y eicosapentaenoico (EPA).

Se puede encontrar Omega 3 en su vertiente de ácido alfa-linolénico (ALA) en fuentes vegetales como los frutos secos: cabe destacar de forma especial la nuez. También está presente en semillas como la chía y el lino, que se pueden ingerir molidas, y en la soja.

En cambio, si se prefiere ingerir el Omega 3 en forma de aceite vegetal, existen muchas vertientes que nos lo pueden aportar: aceite de soja, de canola, de lino, de nuez…

Por último, tal y como se ha apuntado antes, también existen productos enriquecidos con Omega 3. Es habitual encontrar leche y huevos que destacan tener este ácido graso entre sus componentes y que resultan tener muchos beneficios para la salud.

Di no a los suplementos

Mucha gente reniega de comer los alimentos que contienen el Omega 3 y opta por recurrir a los complementos dietéticos. Desde aquí, recomendamos ingerir alimentos que lo contienen de forma natural por un par de sencillas razones.

Por un lado, porque los suplementos no proporcionan beneficio nutricional alguno, mientras que los alimentos que contienen el ácido graso de forma natural aportan otros muchos nutrientes de calidad.

Y por otro lado, porque es un gasto económico para el mínimo beneficio que aportan. Es decir que, además de que los suplementos alimenticios ricos en Omega 3 son muy caros, no salen rentables ya que encontramos la misma cantidad del ácido graso en una sola rodaja de salmón que en 81 comprimidos del producto artificial.