La salsa de soja tiene muchas variedades. En un supermercado o en una tienda especializada en comida oriental pueden llegar a encontrarse hasta 20 tipos de salsas distintas.

La salsa de soja tamari no suele tener trigo, por lo que es perfecta para celíacos

En Japón, y por consiguiente en el resto del mundo, las salsas de soja más utilizadas son la salsa koikuchi, usukuchi, tamari, shiro y saishikomi.

La salsa koikuchi, también conocida como salsa de soja oscura, tiene un color oscuro y suele espesarse con caramelo. Posee un potente sabor y es la salsa de soja más fabricada, ya que casi el 80% de la población japonesa elige utilizar esta salsa.

El nombre de la salsa de soja suave es usukuchi. A diferencia de la koikuchi, su sabor es más salado y posee un color más claro. Esta salsa suele utilizarse en su mayoría para condimentar platos como el pescado, las verduras o las sopas. Su color claro hace que la comida mantenga su atractivo, ya que evita que el color de la comida acabe oscureciendo.

La salsa de soja tamari se elabora con un porcentaje muy pequeño de trigo, y en algunas ocasiones sin nada de trigo. Esto la convierte en la soja más consumida por los celíacos. La falta de trigo hace que su sabor sea más intenso que el de koikuchi, además de tener un color aún más oscuro. Esta salsa suele ser ideal para realizar cocidos, para el teriyaki y para acompañar al sashimi.

Si tamari es la salsa de los celíacos, el shiro, también conocido como salsa de soja blanca, es su ‘kryptonita’. Esta salsa de soja se elabora con muy poca soja y mucho trigo, lo que provoca su dulce sabor y su color claro.

La quinta salsa más consumida es una salsa de soja de doble fermentación llamada saishikomi. Esta salsa suele tener una textura más espesa debido a que se fermenta dos veces y es la que suele acompañar al sushi y al sashimi.

La salsa de soja china

Existe una variedad de la salsa china a la que se la denomina como salsa de soja química. Esta salsa se elabora de forma artificial mediante harina de soja. Contiene los ingredientes originales, pero su elaboración es distinta, lo que hace que el color de la soja acabe siendo muy clara, por este motivo, se le suelen añadir endulzantes y colorante de caramelo para oscurecerla.