A pesar de ser un plato de origen greco italiano, lo cierto es que la lasaña es uno de los platos más internacionales de la gastronomía. No importa a qué parte del mundo vayas, que no te será difícil encontrar un bar o restaurante en el que te ofrezcan este plato. Y es que su preparación es tan sencilla y permite tanta combinación de sabores, que el mundo no se ha podido resistir a uno de los estandartes de la gastronomía italiana.
La lasaña al horno también se puede hacer con verduras o pescados y se termina con bechamel y abundante queso rallado para gratinarla en el horno. Ambos platos tienen como lugar de origen Italia.
La preparación de la lasaña resulta muy sencilla y admite una gran variedad de combinación de sabores
La palabra "lasaña", tal y como se puede leer en Wikipedia, “proviene del griego "lasanon", a través del latín "lasanum", que se refiere al cazo en el que se cocinaba. La palabra singular en italiano eslasagna y en plurallasagne se aplica indistintamente al plato o a la pasta en forma de láminas. Es un plato fuerte que se suele comer en invierno o en los periodos fríos de la primavera.
Lasaña en Donostia
El Bodegón Alejandro de la Parte Vieja ofrece en su menú de degustación y en la carta una ‘lasaña fría de pisto, con anchoas marinadas’. Antonio Toscano es uno de los cocineros de este emblemático establecimiento y nos cuenta que para realizar esta lasaña “utilizamos pasta wonton, que es japonesa y más fina. La utilizamos porque llena mucho menos y entra muy suavecita. Apenas se nota que lleva esta lámina”.
Así, el proceso de elaboración es el siguiente: “pasta, pisto, pasta, pisto y encima unas anchoas marinadas, que servimos con una crema de gazpacho. Es algo nuevo de este año”. Las anchoas que utilizan las han marinado ellos mismos. “Las compramos frescas, en el Mercado de La Brecha. Las metemos en agua, sal y vinagre durante una hora y luego se conservan en aceite”.
Además, en este restaurante también ofrecen la tradicional lasaña de carne en el menú del día. Ambos platos tienen gran éxito, a pesar de que el primero se acaba de incorporar a la carta.
Por su parte, en el bar La Guinda del barrio de Gros, Romina Mosquera nos explica que ofrecen a los clientes una lasaña vegetal. “La elaboramos con pasta de espinacas y el relleno se compone de espinacas frescas, brócoli, calabacín, bechamel y queso brie y compté. Esta lasaña la servimos de forma individual, en unos moldes de barro que se pueden meter al horno”.