Códigos de  barras

Algunos datos de los códigos de barra son muy fáciles de interpretar [Foto: diariovasco.com]

Números

¿Sabes leer un código de barras?

Esa pequeña etiqueta que va asociada a cada uno de los artículos que compramos dice mucho más de lo que podemos pensar del artículo. Aprender a leerlo puede ser muy útil para conocer datos que, hasta entonces, desconocíamos.

diariovasco.com | 07/08/2013 |

No se trata de un ejercicio sencillo, pero tampoco es algo imposible de entender. Por tanto, un código de barras puede ser interpretado por todo aquel que lo desee y conozca las normas para ello.

Pero, ¿para qué sirve un código de barras? ¿Cuál es su verdadero objetivo? Principalmente, saber dónde se encuentra el objeto desde que se produce hasta que llega al lugar de venta. Además, también permite a las cajeras evitar errores de precios

Existen diferentes tipos, pero el más común, el que nosotros encontraremos en los productos que adquirimos de forma habitual, es el siguiente: EAN13 (European Article Numbering o Numeración Europea de Artículos).

¿Cómo leer el código de barras?

El código de barras EAN consta de 13 números sobre los cuales figura su correspondiente transcripción en forma de barras. Los dos primeros números corresponden a la asociación que asigna los códigos a las empresas fabricantes y distribuidoras. En España, por ejemplo, es la Asociación Española de Codificaciópn Comercial (AECOC) y su número es el 84, así que será muy fácil que en muchos de los productos que compremos, los dos primeros números sean estos dos.

Los cinco números siguientes  corresponden al código asignado a la empresa, y los otros cinco hacen referencia al producto concreto, numerado por el propio fabricante o distribuidor. El último dígito es una cifra de control, que resulta de aplicar un algoritmo matemático a los otros doce dígitos.

Cada uno de los dígitos está representado como un grupo de siete módulos de tonalidades claras y oscuras repartidas de manera que cada dígito está formado siempre por dos zonas claras y dos oscuras de anchura variable, según el número de módulos contiguos de un mismo tipo.

Ahora, cada vez que veamos un código de barras, ya podemos saber algo más sobre el producto, si bien es cierto que sin un lector será complicado conocer el resto de la información.