Cocinar en una habitación de hotel es posible si ésta está equipada con la clásica cafetera de filtro. Obviamente, no todo es susceptible de ser preparado de esta manera, aunque sorprenden la cantidad de platos que se pueden preparar con un poco de maña e ingenio.
Cocinar en una habitación de hotel es posible con una cafetera de filtro
Lo primero es limpiar con agua y jabón, tanto la cafetera como el filtro, para quitar todo lo posible el aroma a café. Si el horario de desayuno te parece demasiado pronto, puedes prepararte tu propio desayuno en tu habitación, incluso puedes aprovechar el primer día y coger del buffet los ingredientes que necesitas.
Con la cafetera bien limpia, echa en la jarra copos de avena instantánea, añade miel, mermelada de frutas y una pizca de sal. Después vierte entre 250 y 350 ml de agua, enciende y en cinco minutos tendrás un rico desayuno de avena.
Pero el desayuno no es la única comida que se puede preparar en una habitación de hotel. Los fideos ramen, por ejemplo, son facilísimos de preparar. Basta con añadir la suficiente cantidad de agua como para cubrir todos los fideos. Dejar que el agua pase por la cafetera y esperar a que los fideos se ablanden, en unos tres minutos deberían estar preparados y listos para escurrir y añadir el aderezo.
Y si por el contrario lo que quieres es olvidarte de comida de hotel y restaurante, y comer algo limpio, te puedes preparar incluso unas verduritas al vapor. Para esta receta hay que introducir las verduras peladas y cortadas, mejor si es en dados pequeños, en la cesta del filtro. Y dejar pasar el agua tantas veces como queramos hasta que consideremos que están listas.
La mejor opción son verduras suaves como zanahoria, calabacín o berenjena, ya que si optamos por verduras más duras y aromáticas como cebollas o pimientos, además de tardar más en prepararlas, el café les sabrá muy raro a los siguientes huéspedes de la habitación.
Platos más elaborados
Pueden parecer recetas demasiado sencillas, aunque muchas veces cuando estamos de viaje es lo que terminamos echando en falta. Si lo que buscas es un plato más completo, puedes optar por un arroz a la cubana, que además es uno de los más fáciles de preparar.
Para preparar el arroz, rellenas la jarra con arroz y la cantidad de agua indicada en el paquete, y enciendes la máquina mientras remueves y controlas que no se pegue y se vaya haciendo. Una vez terminado puedes calentar tomate frito, o cualquier otra salsa, en la misma jarra.