Los principales o más impactantes usos de esta nueva aplicación informática se refieren a la persecución del crimen organizado o a nuevas maneras de marketing. Sin embargo, un sector tan primario como el agrícola también se ha apuntado a esta tendencia.

Es necesario que la producción aumente un 70% con menos agua y químicos y el mismo suelo

De manera breve, con Big Data se entiende la recogida masiva de datos que posteriormente se procesan con un determinado fin. Estas técnicas son muy útiles en un mundo dominado por la informática donde existen millones de datos al alcance de todos, pero es preciso ordenarlos para que adquieran valor.

Es lo que ha pensado una empresa madrileña para aplicar a la agricultura, un sector que sorprende por su capacidad de modernizarse y adaptarse a las nuevas exigencias. La premisa es simple y bien conocida. Según todas las estadísticas, la población mundial en 2050 habrá aumentado a 9.000 millones de personas.

Todas ellas tienen que alimentarse para vivir, por lo que será necesario que la producción crezca un 70% con menos agua, menos químicos y el mismo suelo. Un reto con difícil solución, aunque la aplicación del Big Data puede resultar de gran ayuda, porque es capaz de comunicar al agricultor datos vitales como cuándo y dónde plantar, cuándo recoger los cultivos y cuánta agua necesitará.

El sistema se compone de diversos aparatos que recogen información de los cultivos a nivel de raíz, bajo tierra, en una zona donde no se puede descubrir a simple vista lo que está ocurriendo. A esta información se añade un análisis de los datos meteorológicos que diariamente recogen plataformas públicas o abiertas. El cóctel se completa con la investigación de los nuevos avances en la agricultura, como novedosos tratamientos o métodos diferentes de poda.

Valiosa información

Una vez procesados estos datos, la empresa se encuentra en disposición de ofrecer al agricultor una información muy valiosa como cuándo tiene que regar, qué momento es el mejor para cosechar o por qué parcela debe comenzar el cultivo de sus productos para garantizarse el éxito.

Esta técnica de Big Data está llamada a convertirse en un referente, más aún en un momento en el que el cambio climático, las malas predicciones de un futuro con más personas y menos alimentos, o los escasos rendimientos económicos motivados por competencias desleales minan un sector que será de extrema importancia.