Las ensaladas de invierno deben equivaler a una comida. La base de todas ellas es la lechuga en sus variadas opciones, que servirá como capa sobre la que añadir el resto de ingredientes al tiempo que adornará el plato. Una ensalada que sorprenderá será la de vieiras y fresas a la plancha. Estos frutos de mar, además de sabrosos, son una excelente fuente de grasas saludables omega-3.
Existen muchas opciones de este tipo de ensaladas, como la de tortilla
Las vieiras se hervirán para posteriormente servirlas sobre fresas y lechugas mixtas, rociadas con un aderezo de infusiones de hierbas. Quienes no sean muy amigos de este marisco pero quieran alimentarse bien con una ensalada, pueden sustituirlo por camarones a la plancha o un nutritivo filete de salmón.
Para los más divertidos la mejor opción en la ensalada de tortilla, porque admite todas las variedades que a cada persona se le puedan ocurrir. La tortilla puede tener solo huevo o se le puede añadir algún condimento. Eso sí, es conveniente tener en cuenta que se servirá en trozos y acompañada de otros ingredientes.
Algunos de los propuestos son la consabida lechuga, pollo magro molido, tomate, cebollas, queso cheddar y salsa, que convierten este plato en una perfecta fuente de energía. Si queremos subir el nivel, podemos añadir una cucharada abundante de yogur bajo en grasa que le aporta un sabor muy sabroso.
La ensalada Nicoise es un clásico entre los que no renuncian a las ensaladas en invierno. Está repleta de judías verdes frescas, tomates y patatas, a lo que se añade atún y huevos duros ricos en proteínas. Si añadimos grasas buenas como aceitunas y la rociamos de vinagreta obtendremos un plato equilibrado y atractivo.
Los carnívoros no tienen excusa para no saborear una exquisita ensalada, esta vez basada en el filete. Tan solo hay que adobarlo y dorarlo a la parrilla para que no pierda sus propiedades pero no genere grasas dañinas para el organismo. Cortado en trozos y dispuestos entre la lechuga que prefiramos, lograremos un plato contundente y riquísimo.
Ensalada vegetariana
Los vegetarianos, expertos en esta cocina, pueden probar con una ensalada para la que se necesita tofú, fideos de arroz, pepinos crujientes, zanahoria rallada, judías verdes y cebolla. Se une todo, se le añade una salsa de vinagreta, jengibre y nueces picadas espolvoreadas, y disfrutarán como un carnívoro de un buen cordero.
Cualquier opción es buena para introducir cambios en los habituales menús invernales y conseguir, una vez más, que el acto de comer sea un placer.