La manzana tiene una historia propia que se remonta al inicio de los tiempos, muy relacionada con Adán y Eva, pero existen algunos datos curiosos más contrastados. Un manzano puede llegar a producir hasta 400 manzanas al año y, teniendo en cuenta que hay más de 7.000 tipos de esta especie en el mundo, nos explicamos su fuerte presencia en nuestras vidas. Por cierto, las manzanas flotan en el agua porque están constituidas en un 25% por aire.
La historia del plátano no se queda atrás. Según algunos horticultores, se trata de la primera fruta en nacer sobre la faz de la tierra. Más comprobado está su efecto antiácido natural que nos solucionará un mal momento.
Las fresas son las únicas con las semillas en su exterior
Las fresas, por su parte, son las únicas frutas que tienen las semillas en su exterior, y pueden superar las 200. En relación a posibles marcas, el mango se sitúa como el fruto más elegido del mundo, y no solo por humanos. Los chimpancés se suman a esta tendencia.
El uso del limón como desinfectante natural debido a su alto grado de ácido que mata bacterias puede resultar más conocido, pero ¿sabías que el kiwi tiene el doble de vitamina C que la naranja?
Las frutas con cáscara dura han tenido muchos usos, no siempre alimentarios. Las cáscaras de sandía eran utilizadas para transportar el agua durante las largas expediciones. Otro fruto de corteza es la piña, que madura antes si la apoyamos sobre el extremo en el que nacen las hojas.
La mujer ha recurrido en ocasiones a la fruta para asuntos más propios de su condición. Así, las hojas de la frambuesa regularizan la menstruación tomadas en té. El consumo regular de frutas y verduras durante el embarazo, además, puede disminuir los riesgos de aborto espontáneo hasta en un 50%.
Colores
Los más descuidados de la mesa habrán comprobado en propia piel uno de los poderes de la mora, cuyo jugo se utilizaba antiguamente para teñir la ropa de azul. Y en lo que respecta a los colores, las frutas rojas mejoran la salud cardiaca, las verdes fortalecen el sistema óseo, y las azules y moradas contribuyen a conservar la memoria.
Son solo algunos aspectos curiosos de un producto que compramos casi a diario, y que nos pueden sacar una sonrisa la próxima vez que acudamos a la frutería.