Tras los postres es el momento ideal para relajarse y disfrutar de una amena charla, y este momento puede llegar a ser brillante si se acompaña con una buena taza de café o té. Los más innovadores también tienen en este punto de la celebración una ocasión perfecta para destacar sus artes culinarias.
Si lo que deseamos es sorprender tras la comida o cena, nuestra receta es el choco café navideño. Para ello necesitamos una tableta de chocolate, dos cucharadas de café instantáneo, cuatro de chocolate en polvo y otras tantas de azúcar. También nos proveeremos de cuatro tazas de leche, una astilla de canela, cuatro clavos de olor, esencia de vainilla, una taza de crema chantilly y grageas de chocolate.
En una olla calentaremos la leche junto con la tableta de chocolate, el café, el chocolate en polvo, el azúcar, la canela y los clavos de olor. Lo cocinaremos durante diez minutos removiendo continuamente, para después incorporar la vainilla durante cinco minutos más. Apagamos el fuego, lo servimos en tazas decorado con la crema chantilly y las grageas de chocolate, y a disfrutar de un café innovador.
Con recetas bastante sencillas podremos sorprender a nuestros huéspedes
También lo es el café al Cointreau flambeado con una nube de nata, para lo que necesitaremos una taza de café negro, un chorrito de Cointreau, azúcar glass al gusto y nata líquida. La preparación consiste en juntar en una copa grande un chorro de Cointreau caliente y azúcar y flambear. Una vez apagado, añadiremos el café caliente y lo cubriremos con una nube de nata que a buen seguro será celebrado por los contertulios.
Té al jengibre
Quienes opten por el té pueden utilizar el jengibre como base para ofrecer algo diferente. Para ello, debemos poner cinco tazas de agua a hervir y, cuando llegue a este estado, añadir dos o tres rodajas del rizoma del jengibre, hojas de té y palitos de canela. Tras dejarlo reposar unos minutos para que adquiera todo el sabor, se sirve junto bien azucarado con miel o azúcar moreno.