La citronela es una planta similar al puerro o ajo tierno, aunque algo más dura, de la cual se utiliza el bulbo y parte del tallo tanto para cocinar y preparar bebidas, como para remedios medicinales e incluso como repelente de mosquitos.

Las hojas de citronela son utilizadas para preparar infusiones con diversos beneficios

Es originaria de Asia, sobre todo en cuanto a su utilización en la cocina se refiere, aunque la citronela crece también en África y América. Es muy conocida por su característico aroma cítrico que recuerda a la esencia del limón, de donde recibe otro de sus nombres más conocidos, Lemon grass. Y su utilización en la cocina asiática es muy común; de hecho, detrás del sabor especial de la comida china, a menudo se esconde este aderezo.

Carnes, pescados, salsas, sopas e incluso bebidas son algunos de los alimentos que han encontrado en la citronela el compañero perfecto. Aunque no haya que abusar de ella, ya que es muy intensa, por lo que hay que controlar cuanto se echa. Para ello nos puede ayudar también el formato que mejor nos venga, ya que dependiendo del uso que le vayamos a dar la podemos adquirir en formato fresco o en esencia.

Por un lado, la esencia de la citronela se puede encontrar líquida y es la utilizada, por ejemplo, en la preparación de diferentes cócteles. Aunque también se puede recurrir a ella para aromatizar otras preparaciones de manera rápida y cómoda.

Por otro lado, si se va a utilizar para dar sabor a un plato, lo más habitual es comprar la citronela fresca, al igual que se hace con puerros, cebollas, etc. Para prepararla, lo primero es retirar las capas exteriores. Estas son algo duras y fibrosas, por lo que es mejor no utilizarlas. Una vez pelada, y antes de picarla o cortarla, se recomienda aplastarla un poco con el cuchillo tumbado, como se hace con los ajos, para favorecer la salida de su jugo. Hecho esto, la citronela está lista para ser picada y añadida a la preparación.

Aprovechar toda la citronela

Además, las hojas exteriores retiradas al principio se pueden utilizar también, tras ser desecadas, en infusiones, en vaporeras a la hora de cocinar con ellas o para preparar carnes o pescados al horno o sartén, aunque una vez utilizado para aromatizar no se deben consumir, por lo que se aconseja retirarlas.

De hecho, las infusiones elaboradas con citronela presentan diversos beneficios para nuestra salud, ya que tienen poder antifebril, digestivo, expectorante y analgésico.