Los huevos trufados son una experiencia gastronómica que destaca por su sabor y por la sensación que produce la combinación de ambos alimentos. Además, se trata de un plato muy sencillo de realizar y equilibrado.

Los huevos trufados son un plato sencillo de realizar, sabroso y equilibrado

Los huevos trufados con patatas es su versión más tradicional y sencilla de preparar. Para empezar, antes de cocinar los huevos, es recomendable meterlos durante unos días con las trufas en un recipiente de vidrio para que los huevos se impregnen del aroma de la trufa. Después, los huevos se fríen con abundante aceite de oliva virgen extra. Este plato se combina con un lecho de patatas, y el toque final, es laminar una pequeña porción de trufa sobre ambos alimentos.    

Sin embargo, a lo largo de los años este plato ha evolucionado y ha ampliado sus alternativas a combinaciones más diversas y originales.

Una de las opciones que deriva de la receta tradicional pero que le aporta un toque de sabor a mar son los huevos estrellados con gulas y trufas. Se trata de un plato sencillo de preparar, ya que sigue los mismos pasos que el tradicional pero muy completo, la diferencia es que por separado se cocinan las gulas con unas rodajas de trufas y el huevo, para después juntarlos. Es un plato muy completo y querido por los más pequeños.

En cambio, para los fieles de la comida sana, los espárragos trigueros con huevos trufados son la opción más saludable y sabrosa. Su preparación es muy simple. Por un lado, los espárragos trigueros se cocinan a la plancha, mientras que, paralelamente, los huevos tienen que pasar unos días con la trufa en un recipiente para adquirir su sabor. Después, el huevo se cuece y se pone encima de los espárragos. Como punto final se le añade unas ralladuras de trufa sobre el plato.  

Huevos trufados, también en crep

Por último, el crep de foie y pato con huevo trufado es el plato ideal para los amantes de la comida francesa y los aperitivos salados. Para esta receta los ingredientes necesarios son confit de pato, escalopes de foie, brotes tiernos, cebolla, huevos, y trufa.

Por un lado, con la batidora deberemos afanarnos para conseguir una masa líquida pero algo espesa, que dejaremos que se enfríe. Después, se pica el confit, se hace el foie en la plancha y se pocha la cebolla. Para finalizar, con la masa se cocinan los creps en la sartén y se le añade un huevo frito trufado.