El mes de enero llega con muchos nuevos propósitos y cantidad de alimentos que encuentran en esta época del año el momento ideal para ofrecer todo su esplendor.

La carambola o fruta estrella, excelente en enero, aporta un sabor tropical a las ensaladas

Perfecta para depurar nuestro cuerpo y favorecer la digestión, la piña es una fruta de enero. Aunque en su aparición en nuestro país fuera considerada un fruto exótico y el primer mes del calendario sea su momento álgido, la realidad es que ya podemos encontrar la piña en cualquier época del año. Para saber si está madura hay ciertos trucos que nos pueden ayudar: debe desprender un aroma intenso, sus hojas tienen que presentar un tono naranja en la punta y su superficie debe ceder un poco al tacto.

Aunque si queremos apostar por fruta pero no somos muy de piña, la carambola es una buena alternativa. Conocida también como ‘fruta estrella’ podemos encontrar la mejor versión de la carambola en dos épocas del año, de agosto a octubre y de enero a marzo.

Un sabor agridulce, una piel fina, un tono entre verde y dorado, y un interior crujiente son algunas de las características de este alimento utilizado a menudo en diversos platos. La forma estrellada de sus rodajas la hace muy popular para ensaladas, en las que además de mejorar su presentación aporta un toque muy refrescante y tropical.

Con diversas variedades, las espinacas son un alimento que alcanza su punto álgido también en invierno. Muy versátiles en la cocina, sus hojas son muy resistentes, por lo que son comercializadas durante todo el año. Las de hoja lisa se suelen encontrar en formato fresco, ya que soportan perfectamente el transporte, y la de hoja rizada, más comunes en el mercado, congeladas.

De la tierra al mar

Pero no todo van a ser productos obtenidos de la tierra, y es que si lo que queremos es apostar por un pescado de temporada, enero es el momento de la lubina. El sabor de este alimento se puede disfrutar tanto a la plancha, como al horno o a la brasa, acompañada por una guarnición de verduritas. Perteneciente a la familia de los pescados blancos, además de un fino aroma la lubina representa uno de los pescados más magros.