Un manojo de cerezas

Las cerezas regulan el ritmo cardíaco y los ciclos del sueño del cuerpo [Foto: diariovasco.com]

De temporada

Cerezas: pequeñas frutas, grandes beneficios

Las cerezas del Jerte (Extremadura) y de Milagro (Navarra) tienen una fama notable mientras que en Lleida se producen las más caras del mundo: las Cherry Glamour

diariovasco.com | 10/07/2013 |

Las cerezas son una enorme fuente de salud y en esta tierra, por suerte, tenemos al alcance de la mano cerezas de gran calidad como las que se producen todos los años en el valle del Jerte (Extremadura) o, más cerca del territorio guipuzcoano, en la localidad ribereña de Milagro.

El calor del verano invita a consumir esta fruta llena de antioxidantes que ayudan en la reducción de enfermedades cardíacas y cáncer, pero es que los beneficios de las cerezas van mucho más allá. Las cerezas contienen melatonina, un antioxidante que ayuda a regular el ritmo cardíaco y los ciclos de sueño del cuerpo y son además, una excelente fuente de beta caroteno (vitamina A). También son ricas en vitaminas C, E, potasio, magnesio, hierro, ácido fólico y fibra y pueden reducir la inflamación y los síntomas de la artritis y la gota. 

Las cerezas han estado durante muchos años desterrados de la dieta de las personas con diabetes, pero hoy se sabe con absoluta certeza que los diabéticos también pueden consumirlas. La clave para disfrutar del sabor y las propiedades nutricionales de la fruta está en ser comedido con la cantidad.

A 320 euros el kilo

Como curiosidad, cabe señalar que las cerezas más caras del mercado se empezaron a recolectar en el mes de marzo en Lleida. Son tan exclusivas porque tienen la particularidad de ser las únicas cerezas que se producen en todo el mundo en el periodo que va del 15 de marzo al 25 de abril. Estas cerezas a las que se conocen como Cherry Glamour se venden, en su mayoría,  en el extranjero a un precio que no está al alcance de todo el mundo. El precio en origen, al productor, va de 40 a 130 euros el kilo según el grosor y los consumidores las pagan entre 50 y 320 euros en países a los que no ha llegado la crisis como Qatar, Rusia, Dubai o Singapur.

El sabor dulce de las cerezas en plena estación, su llamativo color rojo, el jugo que desprenden al masticarlas y la facilidad con que se llevan son razones más que suficientes de este noveno motivo, que anima a incluir un puñado de cerezas en la dieta de cualquiera y muy especialmente en la de los niños.